Anuncia en el Pleno el nombre de la empresa que está realizando esta labor, pero no consta ningún Decreto de adjudicación

El servicio acumula un sinfín de problemas e irregularidades desde la llegada de los nacionalistas a la Alcaldía

anaruedadiciembre2016

La deficiente gestión del contrato de recogida de animales de Barakaldo escribió ayer un nuevo capítulo. En una respuesta escrita a una pregunta realizada en el Pleno Municipal, el Gobierno del PNV reveló el nombre de la empresa que actualmente está prestando el servicio, pero este encargo no consta en ningún Decreto de Alcaldía. Todo pese a que cualquier adjudicación de un contrato público, aunque sea menor, debe realizarse a través de este mecanismo administrativo.

“Hemos rastreado la relación de Decretos y no hay noticias de dicha empresa”, ha revelado hoy en rueda de prensa la portavoz del PSE-EE barakaldés, Ana Belén Quijada. Estaríamos así ante un caso de contratación verbal, que se suma a la larga lista de irregularidades que acumula el servicio desde que el PNV gestiona el Ayuntamiento.

Los Socialistas temen que esta situación deje desprotegidos tanto a los vecinos y vecinas como a los propios animales, en su mayor parte perros abandonados o que se han extraviado de sus dueños.

El contrato de recogida y albergue de animales concluyó el pasado 30 de noviembre después de un sinfín de desencuentros entre la institución municipal y la empresa adjudicataria, que afectaron a la calidad del servicio. Ambas partes decidieron no renovar la relación contractual que les unía (existía la opción de prorrogarla un año más), así que el Gobierno del PNV se vio obligado a convocar un concurso público para adjudicar nuevamente el servicio por 58.433,50 euros anuales.

Ninguna empresa presentó una oferta para prestar el servicio, por lo que el contrato quedó desierto. El Gobierno del PNV decidió entonces partir el servicio en dos contratos menores, a prestar entre noviembre y febrero: por un lado iba la recogida de animales y, por otro, el albergue de los mismos.

Existe un Decreto precisamente el 30 de noviembre por el cual se adjudica el albergue de los animales a una empresa barakaldesa, pero no ocurre lo mismo en el caso de la recogida de los perros. Asimismo, a día de hoy aún no se han aprobado siquiera los pliegos de condiciones para volver a sacar a concurso el servicio.

 

CENTRO DE MAYORES DE RONTEGI Y GATOS

En el Pleno Municipal de ayer también se abordaron otros asuntos de interés. El PSE-EE presentó sendas baterías de preguntas en relación con el retraso en la apertura del centro social para mayores de Rontegi y la implantación de un sistema de Captura, Esterilización y Suelta (CES) de gatos en Barakaldo. En ambos casos el Gobierno del PNV respondió a los Socialistas través de los medios de comunicación antes de la propia sesión plenaria, exhibiendo su escaso talante democrático.

Esta práctica está siendo utilizada por los nacionalistas con las iniciativas de otras formaciones políticas y, a juicio de Quijada, “demuestra que en Barakaldo la iniciativa política parte de la oposición, no del Gobierno”. El PNV lo sabe e intenta aparentar lo contrario precipitando anuncios en los medios, sin detallar que se trata de iniciativas de otros partidos.

Ayer también el PSE-EE avaló en el Pleno una moción de urgencia de Ekologistak Martxan para que el próximo año se solicite una subvención a la Diputación Foral de Bizkaia con el fin de ampliar la instalación del quinto contenedor para residuos orgánicos, la cual fue aprobada por todos los grupos políticos salvo el PP.

Por otra parte, en el Pleno los Socialistas apoyaron una moción de EH Bildu para mejorar la accesibilidad en las instalaciones municipales, que recogía en esencia lo que ya se reflejaba en una Declaración Institucional impulsada por el PSE-EE con motivo de la celebración del Día Internacional de la Discapacidad el pasado 3 de diciembre.

También se aprobó un texto conjunto entre PSE-EE y PNV en relación con la necesidad de ahondar en la colaboración policial y el refuerzo de la Ertzaintza como policía integral, en base a lo recogido en el Estatuto de Gernika. Ello hizo decaer una moción de EH Bildu exigiendo la marcha del País Vasco de la Guardia Civil y la Policía Nacional.

En otras dos mociones los Socialistas se abstuvieron. En el caso de un texto de Irabazi instando a elaborar una ordenanza que regule la concesión de subvenciones a los jóvenes para poder emanciparse, el PSE-EE consideró que se trataba de un texto pobre y muy poco preciso, pese a estar de acuerdo en la necesidad de las ayudas.

Además, los Socialistas decidieron abstenerse en una moción del PNV sobre la accesibilidad en las estaciones de tren de Desierto y Lutxana. El texto trataba de eludir la responsabilidad de la alcaldesa al no cerrar un acuerdo con ADIF y Renfe para facilitar el acceso a los andenes desde la pasarela peatonal de Urban a través de unos ascensores, pese a que se llegó a un preacuerdo con dichas instituciones durante el mandato del PSE-EE en el Ayuntamiento.