Tres nuevos servicios se acaban de quedar sin contrato por la inacción de los jeltzales y el KBUS lo hará próximamente, lo que está causando un perjuicio a los vecinos y vecinas

El Pleno evidenció ayer la falta de iniciativa de la alcaldesa y su equipo; presentó otra vez menos propuestas que la oposición

ayunta

La desidia del Gobierno del PNV está provocando la paralización de la gestión municipal en Barakaldo. El Pleno ordinario de febrero, celebrado en la tarde de ayer, evidenció nuevamente la alarmante situación que atraviesa el Ayuntamiento; una situación que preocupa en el PSE-EE.

Entre los 28 informes de reparo de la Intervención Municipal que se trataron ayer -que suman la cifra récord de 10 millones de euros, 7 si descontamos los asuntos sociales-, tres se referían a importantes servicios que acaban de quedarse sin contrato por la falta de previsión de los jeltzales: el Centro de Día de La Paz, la limpieza de colegios públicos y el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD). A día de hoy, el Gobierno del PNV ni siquiera ha aprobado los expedientes de contratación para regularizarlos.

A la lista de servicios en situación irregular se unirá próximamente el autobús urbano. El actual contrato del KBUS finaliza en abril y ya no existe tiempo suficiente para adjudicar el servicio a una empresa antes de esa fecha, lo que va a retrasar su extensión a nuevos barrios.

“Los vecinos y vecinas se están viendo gravemente perjudicados por el bloqueo que existe en la gestión municipal. Muchos de ellos no tienen transporte público ni pueden recibir asistencia domiciliaria porque el PNV tiene paralizados los nuevos contratos donde se deben recoger las características del servicio”, ha advertido en rueda de prensa el concejal Socialista Carlos Fernández.

 

PUBLICIDAD Y PROPAGANDA

En cambio, el Gobierno jeltzale se da prisa por sacar adelante cualquier contratación que sirva para hacer publicidad y propaganda. Muestra de ello fueron los 28.000 euros gastados en esta materia en el programa navideño Gabonaldia, que también recibieron reparos de  la Intervención Municipal y se suman a los 200.000 del contrato que existe en el área de Alcaldía.

La falta de iniciativa de la alcaldesa y su equipo volvió a quedar en evidencia también en el Orden del Día del propio Pleno. Entre los asuntos abordados, había nuevamente menos iniciativas del Gobierno que de la oposición; 6 fueron las propuestas de acuerdo del PNV y 8 los temas planteados por los grupos de la oposición.

Todo ello, sin contar dos asuntos que finalmente no pudieron debatirse: la moción del PSE-EE con medidas concretas para evitar el cierre del Colegio La Milagrosa y ampliar las mejoras en los colegios públicos, cuya tramitación ha sido denegada por la alcaldesa, y una iniciativa de urgencia de los Asociación de Padres y Madres (AMPA) del Conservatorio avalada por todos los partidos políticos salvo el PNV, cuyo debate se trasladó a un Pleno Extraordinario a celebrar el próximo lunes.

 

ASCENSORES, CENTRO DE SALUD DE RETUERTO…

En cuanto al resto de asuntos, el apoyo de los Socialistas a sendos Estudios de Detalle posibilitará la instalación de ascensores en los edificios situados en los números 7, 8 y 9 de la calle La Paz (Cruces) y el portal 24 del Grupo 1º de Mayo (San Vicente). El PSE-EE dio asimismo su voto favorable al pliego del contrato de recogida de basuras y limpieza viaria, al recogerse cláusulas para defender los intereses de los trabajadores y trabajadoras y mantener la calidad del servicio.

Por otro lado, el Pleno aprobó con el apoyo del PSE-EE una moción del PP para instar al Gobierno Vasco a no demorar más la apertura del Centro de Salud de Retuerto. Cabe recordar que el local donde se habilitará el ambulatorio fue cedido hace más de dos años por el Ayuntamiento, con un alcalde Socialista. También fue el PSE-EE quien logró a través de una enmienda al Presupuesto del Gobierno Vasco los 600.000 euros necesarios para equipar el centro.

“El Centro de Salud ya debiera estar abierto. Es descorazonador ver a personas mayores o a padres y madres que empujan un carrito de bebé subiendo una cuesta importante porque deben desplazarse hasta Cruces para ser atendidos por el médico”, ha valorado Carlos Fernández.

Ayer también salió adelante una moción de los Socialistas para instar al Gobierno Vasco a que realice una reflexión sobre el índice de referencia a tener en cuenta para determinar las cuantías de las prestaciones de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI).

El texto también solicita nuevos programas y recursos para la activación laboral que permitan la inserción al mundo del trabajo de las personas empleables que perciben la RGI, “paliando una situación coyuntural de necesidad y favoreciendo su incorporación al mercado laboral”.

Esta moción hizo decaer otro texto presentado por EH Bildu que pedía incrementar este año la RGI tomando como base el Salario Mínimo Interprofesional y no el IPC. “No se puede elegir siempre el índice que más convenga. Los años anteriores subió más el IPC que el Salario Mínimo y se aplicó ese incremento superior. La RGI es un asunto demasiado serio como para usarlo de manera partidista. Los partidos políticos deben llegar a un acuerdo duradero que fortalezca el sistema vasco de protección social”, ha subrayado Fernández.